Gordito con Cachucha

Extraño a Gordito Chulo, jamás imaginé pensar tanto a una persona que está en la etapa post-puber jajaja. Es eso, tiene grandes preocupaciones económicas, hace lo que su papá le dice que haga, miente para aparentar estar en un lugar el cual nunca le permitirían estar... pero sabes? creo que apesar de eso es todo un hombre, y no se si lo creo así por que necesito uno de verdad (ja) y lo alucino con él o porque en realidad es él, uno de carne y hueso. A pesar de que no lo siento mío, entre ausencia y ausencia tiendo a pensarlo, a extrañarlo, a imaginar la idea de un reencuentro. Cada vez que hablo con él, percibo (no se si ésto también sea un mal alucine) esa ñoñez que me encanta! Esa mezcla de ingenuidad, pendejéz y sinceridad que me hacen mantener ésta avalancha de emociones tan bizarras.
Lo siento mío, vulnerable, adorable, con ganas de pasar por ese aparato que acorta las distancias, tranquiliza por que sabes a la otra persona (en éste caso mi gordito hermoso) del otro lado de la línea, pero que te enloquece cuando de repente jamás vuelve a emitir el más ínfimo sonido (ring, ring, riiiiiing). Quisiera atravezar la línea y comérmelo a besos, enloquecerlo con cada uno de ellos, con cada caricia, volverme loca entre sus manos, perderme y luego regresar... y esperar hasta que ése terrible aparato vuelva a sonar.