martes, 13 de mayo de 2008

En Juárez los buenos somos más

Vivo en una ciudad Fronteriza con Estados Unidos y desafortunadamente la inseguridad, el crímen y el narcotráfico le han dado una muy mala fama de un tiempo para acá.

Es increíble para las personas que tenemos familiares y/o amigos en otros estados de la república, en Estados Unidos (cruzando el charco) o que tenemos la oportunidad de visitar cualquier otro lugar, la manera en la que los demás perciben ese miedo y cierta repulsión por la situación que se cree que se vive en esta ciudad, lo primero que te preguntan ¿no te da miedo vivir en esa ciudad? ¿Que no has pensado en la posibilidad de cambiarte ? ¿Es cierto que en Juárez matan a las mujeres?

Nada menos desde principios de año en mi trabajo (nos dedicamos a coordinar proyectos comunitarios de desarrollo social) teníamos agendada una visita de unos Jóvenes Filantropos desde Pensilvania yresulta que e ésta semana nos avisaron que por causas de fuerza mayor la visita se canceló. Ah mello !

Tengo 25 años radicando en esta ciudad y hace diez años desafortunadamente tengo que admitir, la inseguridad y la violencia se ha incrementado, precisamente en enero de este año se han desatado una serie de eventos desafortunados donde los involucrados en la escena han sido policías, narcotraficantes y desafortunadamente personas inocentes que sin deverla ni temerla pierden la vida o resultan malheridos por estar en la hora y el lugar equivocados.

No se si la intención de esto que escribo sea precisamente "justificar" lo injustificable o pretender que en mi ciudad "no pasa nada" concientemente no lo considero así, creo que precisamente éste año me ha dado mucho miedo y creo que es un miedo colectivo.

Nada menos el domingo 11 de mayo hubo una Marcha Ciudadana por la Paz aquí en la ciudad, marcha a la que no asistí por una razón, personalmente creo que no tengo que demostrarle a los capos que soy buena ciudadana ni recordarles a las autoridades que deben hacer bien su trabajo, por eso todos somos actores sociales y como tal deberíamos asumir nuestros papeles, por supuesto que aplaudo y felicito a las personas que se dieron el tiempo y que por la razón que haya sido asistieron a esa marcha, seguramente, quiero pensar así, que su intención entre muchas otras fue de rechazo a tanta violencia y de manifestar el deseo que seguramente todos, hayamos asistido a la marcha o no, tenemos de vivir en paz.

El lunes por la mañana intenté experimentar un cierto cargo de conciencia por no haber asistido, sentimiento que desapareció instantaneamente cuando al llegar a la oficina un tipo (compañero mío por desgracia) entró a la oficina del director ejecutivo (trabajo en una ONG) Proponiendo con la mano en la cintura un bono "extra" por haber asistido a la marcha, por Dios! casi me voy de espaldas, me pregunté realmente cuál sería la verdadera intención de todas las personas que asistieron a esa marcha, y rezé por que fuera la mejor para la situación que se vive en estos momentos.

En relación al caso de la mala fama y tal, creo que los medios de comunicación tienen algo que ver en que como reguero de pólvora, éste desprestigio por Ciuda Juárez se haya extendido por casi todo el mundo, convertido en un cierto miedo colectivo por las personas que vivimos aquí y repugnancia total por las personas que nos "ven del otro lado", está por demás decir que amo a mi ciudad así con todo lo que se vive, es un lugar que me ha dado mucho y a manera personal quisiera que quien leyera ésto también se enterara de que Juárez tiene algo de bueno que hace que los que radicamos aquí no salgamos corriendo despavoridos a otro sitio.

Tengo 25 años viviendo aquí, en ciudad Juárez viví una infancia bella, chirotona hasta el gorro, me tocó la última etapa del bote pateado, todavía jugaba en las calles oscurita la tarde, no había bronca, toda mi adolescencia utilicé el transporte público (la rula, la rutera, la rulis) y jamás me pasó algun percance, que alguien me siguiera, que me robaran, me saltaran o quisieran pasarse de lanza con mi persona, nunca.

Ahora en estos tiempos me han sucedido muchas cosas que a la fecha no permiten que me caiga el 20 de que en Ciudad Juárez se respira la violencia, el miedo y la inseguridad, o por lo meno no tan cañon.

Tengo toda la vida viviendo en la casa donde ahora vivo y nunca, así, nunca, se ha metido alguien a robarnos ni una escoba, el lugar en donde vivo a pesar de no ser de la hig es un lugar de cordialidad, vecinos como todos, metiches, fisgones, chismosos pero nadie se mete mas allá del rumor con nadie más, al contrario tenemos el número telefónico de todos y cuando algo esta sospechoso al rededor de nuestras casas, nos marcamos aunque en toda la semana ni nos hayamos visto.

Me han sucedido cosas que nadie lo creería, viviendo enuna ciudad con esta fama, por ejemplo en la calle más de tres personas, hombres y mujeres se me han acercado para decirme "Señorita, cierre bien su bolsa por que se le está viendo la cartera" o "Tenga cuídado con su bolsa, no se fie ni de su propia sombra" por que eso si, desde que tengo uso de razón, debo admitirlo, soy una despistada de maratón, una vez en el banco al momento de hacer un movimiento sin querer dejé mi cartera encima de la mesita de firmas, me formé en la línea, me atendieron, salí del banco, fui a mi casa a comer, regresé al trabajo y en el camino me di cuenta de que no traía la cartera, visa lazer, identificaciones, targetas de débito y crédito, dinero en efectivo que pa´acabarla ni era mío, licencia de conducir y todas las pendejaditas importantes que puede traer una mujer en la cartera, a medio camino me regresé hecha la madre al banco, en mi mente no dejaba de maldecir ese momento, mientras traía la mitad del alma perdida, entré al banco y antes de preguntar nada al guardia de la entrada, volteo hacia la caja que horas antes me atendió, por que para entonces ya habían pasado varias horas, y el cajero que adoré en ese momento me hace señas con mi cartera negra en su mano, obviamente me preguntó algunas cosas relacionadas con lo que contenía la cartera para verificar que efectivamente fuera mía y m ela entregó, luego me contó que una señora se acercó a él, le entrwego la cartera y le dijo: "jóven esta cartera no es mía, seguramente alguien la olvidó encima de aquella mesa" me dice el cajero nuevamente "si gusta revísela" puta sentí que volví a nacer, la revisé y efectivamente volví a nacer, a la cartera no le faltaba ni un peni, conté el dinero, las targetas, mis identificaciones, mi visa y todo estaba intacto! alguien puede creer que todo esto me haya pasado en ciudad Juárez? Todo esto lo digo con mucho orgullo, agradeicnedole a Diosito estos buenos momentos por que se que no es simplemente suerte, amo mi ciudad y la bendición de Dios que no me abandona, esto me basta y sobra para darme cuenta que después de todo vivir en "La Ciudad de las Muertas" no está tan de locos, ustedes qué creen?

Lo único que me preocupa es ¿ Por qué ésto no se publica? Por qué razón ésto no tiene eco? Será que solo me ha sucedido a mi? Definitivamente no creo.

lunes, 12 de mayo de 2008

El amor no se crea ni se destruye, solo se transforma

Quisiera saber que pasa con ese amor desperdiciado, ese amor que aveces damos de más, ese amor que no cabe en la conciencia del otro por que simplemente ese otro no tiene la misma capacidad de amarnos . Se regresa? No creo por que ya salió de ti. Se desperdicia? tampoco por que nace sin pretender nada. Muere? Más bien creo que me ha mantienido viva. Se acumula? Huy no, ya hubiera reventado de amor. Simplemente flota en el aire? Si así fuera no hubiera tanta maldad. A mi se me hace que se reproduce y se transforma por eso jamás dejamos de amar y cada vez lo hacemos con más intensidad.

Help Me!

Recuerdas aquella última vez? Pues si regresó y que crees? Si acepte! Que hago? A qué lugar puedo correr? Algún lugar a kilómetros de aquí que quiera darme asilo amoroso?
Algún lugar con colinas y pastizales, puede ser un lugar donde pueda ocuparme, embotarme la cabeza con ocupaciones como conocer gente, ubicar ciertas cosas, lugares, ciertas personas que me despavilen.
Un lugar donde pueda olvidar esto que siento, tal vez éste amor que me destruye.

A veces siento como si estuviera comiéndome un pastel de chocolate, harta, con la cara embarrada y a punto de vomitar juro no poder más, pero ante alguna insistencia continúo pensando que si sigo así en tres segundos más voy a reventar!